Se trata de columnas de piedra normalmente rematadas por una bola o una cruz, situadas en un lugar público importante que representaba la categoría administrativa del lugar. Solo se erigían en los lugares que tenían plena jurisdicción e indicaban el régimen (eclesiástico, concejil, etc...) al que estaban sometidos. Además tenían una función de marcaje de límite territorial. También en ese lugar se exponía a pública vergüenza a los condenados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario